08 Feb ¿De dónde proviene el sabor de nuestra gastronomía colombiana?
¿Has escuchado el dicho “somos lo que comemos”? No podría ser una mejor frase para describir que, dentro de nuestra increíble gastronomía colombiana, se encuentra la historia de nuestro país. A continuación, te explicaremos de dónde proviene nuestra sazón.
Este recorrido nos llevará desde los sabores de la América aborigen, pasando por el periodo de la conquista y colonia, y llegaremos a nuestro proceso de independencia y la conformación de la nueva república donde se consolidaron los platos típicos de nuestra cocina. ¿Nos acompañas?
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Todo comienza en la América ancestral
¿Te imaginas una pizza sin tomates?, ¿una tarta de papa española sin papa?, ¿la vida sin la arepa? Algunos expertos señalan que la gastronomía del mundo debe algunas de sus mejores preparaciones a nuestros ingredientes aborígenes (Illera, 2012).
Pero nosotros también le debemos parte de nuestra gastronomía colombiana a esta fusión. Sin embargo, no nos adelantemos. Antes de la llegada de los españoles en 1492, las comunidades indígenas de nuestro país tenían alimentos importantes dentro de su dieta.
Por ejemplo, los muiscas que habitaban en la cordillera de los Andes tenían como base de sus preparaciones el maíz. Este alimento es famoso por ser el ingrediente principal de las arepas, pero también de la chicha y la mazamorra (Arcila, 2016).
Los muiscas también cultivaban otros alimentos originarios como el frijol y la calabaza (Rodríguez, 1998). En la actualidad continúan siendo parte de las costumbres de la región Andina, en donde podemos encontrar que muchas de sus sopas y preparaciones contienen estos ingredientes (Sánchez y Sánchez, 2012).
Sin embargo, la comida típica de Colombia también le debe su sabor a otras comunidades indígenas, como las amazónicas. De ellas tenemos la yuca, un ingrediente importante dentro de los platos típicos de la región Amazónica.
Asimismo, el ají que utilizamos en preparaciones como el ajiaco y el sancocho (Sánchez y Sánchez, 2012).
La gastronomía colombiana en el periodo de la conquista y la colonia
No podemos hablar de la historia de Colombia sin partir de uno de los procesos históricos más importantes: los periodos de conquista y colonia. Y es que la llegada de los españoles aportaría nuevos e importantes ingredientes a las preparaciones de nuestras comunidades indígenas.
¿Sabías que los españoles realizaron encuestas para conocer nuestra riqueza natural? En el año de 1604 los cuestionarios contenían 355 preguntas de las cuales 40 hacían referencia directa sobre los alimentos del campo y las preparaciones (Illera, 2012).
Y entonces, ¿qué caracteriza estos periodos? La introducción y adaptación del plátano en 1516 por los misioneros españoles (Patiño, 2012). Aunque los españoles también trajeron las vacas, las gallinas y frutas como el mango, el melón, las naranjas, las mandarinas, el limón y la caña de azúcar (Revista Semana, s.f.).
Sin embargo, nos enfocaremos en el plátano porque es uno de los ingredientes principales de la comida típica de la región Pacífica. Inicialmente fue adaptado por las comunidades emberas que lo suelen consumir cocido o asado y como complemento de algún pescado (Sánchez y Sánchez, 2012).
Pero el plátano también representa la herencia africana en la preparación de alimentos dentro de la gastronomía colombiana: los fritos.
¿Disfrutas de un buen patacón con hogao? La combinación de condimentos, especias, verduras y aceite se lo debemos a nuestras comunidades afrodescendientes (Museo de Antioquía, s.f.).
¿Por qué es importante el periodo de la independencia y la nueva república para la gastronomía colombiana?
Después del periodo de la independencia, la gastronomía colombiana tendría un nuevo papel dentro de la sociedad. Terminada la guerra, comenzaría la influencia de otras cocinas del mundo como la de Inglaterra (Martínez, 2012).
Por ejemplo, en 1827 el comisionado inglés John P. Hamilton dejó constancia en su libro Travels through the Interior Provinces of Columbia (Viajes a través del interior de las providencias de Colombia) las nuevas adaptaciones de los tipos de corte inglés en la carne (Martínez, 2012).
Aquí hay algo importante que señalar: además de él, otros autores también demostraron la riqueza de la gastronomía colombiana. Este es el caso de Jorge Isaac con su obra María publicada en 1867 (Patiño, 2012).
Como puedes ver, nuestra riqueza gastronómica es inigualable. Es momento de que aproveches nuestros deliciosos sabores. ¿Te arriesgas a hacer un recorrido gastronómico por las costumbres de la Región Caribe y los Llanos Orientales? ¡Seguro te va a encantar!
BIBLIOGRAFÍA.
- Arcila, P. (16 de noviembre de 2016). Top 5 de la comida ancestral colombiana. Señal Colombia.
- Illera, C. (2012). Nuestras cocinas desde el Nuevo Reino de Granada (siglo xvi) hasta la República (siglo xix), a la luz de los escritos de algunos cronistas y viajeros. Ministerio de Cultura.
- Martínez, A. (2012). Mesa y cocina en el Siglo XIX. Colombia. Ministerio de Cultura.
- Museo de Antioquía. (s.f.). La huella gastronómica de África.
- Patiño, G. (2012). Fogón de negros. Cocina y cultura en una región latinoamericana. Ministerio de Cultura.
- Revista Semana. (s.f.). Los 500 datos del descubrimiento.
- Rodríguez, J. (1998). Apuntes sobre la alimentación de la población prehispánica de la Cordillera Oriental de Colombia. Revista Maguaré, (13), 27-71.
- Sánchez, E. y Sánchez, C. (2012). Paseo de olla. Recetas de las cocinas regionales de Colombia. Ministerio de Cultura.