Las arepas colombianas están presentes en la mesa desde que sale el sol hasta que oscurece. Conquistan corazones con su increíble variedad: hay dulces, saladas, asadas, fritas, sencillas e, incluso, rellenas.
Te invitamos a conocer un poco los orígenes y curiosidades de estas consentidas de la comida típica de Colombia.
Este delicioso alimento nos acompaña desde la época precolombina. Las distintas comunidades indígenas del país cosechaban el maíz y hacían preparaciones con él. Esta era una práctica muy importante, ya que el maíz era considerado un regalo de los dioses (Colombia.co, s.f.).
La masa, ya sea solo de maíz o mezclada con otro ingrediente, se manipula para formar un disco que se frita, se asa o se hornea. Las arepas colombianas se disfrutan en cualquier momento del día. Son un elemento insigne de un desayuno o unas onces, pero también se encuentran como acompañante en almuerzos y cenas típicas (Fuchs, 2022).
Las arepas han sido populares en la región desde antes de que se crearan las fronteras políticas actuales. Pero, recientemente, ha surgido un interés especial en ellas en otras latitudes. Algunos atribuyen esta atención a “Encanto”, la película de Disney que tiene a Colombia como escenario (Vergara, 2021). Esta deliciosa comida típica, en cualquiera de sus versiones, tiene el poder mágico de hacernos sentir en casa.
Variedades de arepas colombianas
Las variedades de maíz y de ingredientes disponibles en las regiones han permitido crear distintas versiones de las arepas. Así que conozcamos las más representativas.
La arepa boyacense
Tiene su origen en el municipio de Ventaquemada, Boyacá, a dos horas de Bogotá. Las preparaban los campesinos con el maíz que cultivaban y molían (Stern, s.f.).
La arepa boyacense está hecha de harina de maíz amarillo, leche, mantequilla, queso, sal y azúcar. De hecho, su sabor dulce es su principal característica, además de su grosor. Se suele cocinar en un horno de leña, un sartén o una plancha caliente (Colombia.co, s.f.).
La arepa de chócolo o choclo
Es elaborada con maíz amarillo, que es tierno y dulce, por ser recién cosechado. Se mezcla con mantequilla derretida y huevos, para formar una masa que se cocina en un sartén. Una vez hecha, se complementa con distintos tipos de queso y se convierte en un delicioso desayuno o merienda (Colombia.co, s.f.).
Esta arepa puede encontrarse en la mayoría de las regiones del país. Sin embargo, se cree que surgió en Antioquia, Risaralda y Valle del Cauca (Colombia.co, s.f.).
La arepa paisa
La más delgadita y versátil de las arepas colombianas es la paisa. ¡Combina con todo! Su masa se hace solamente con maíz, por eso es perfecta para sazonarla libremente con mantequilla, queso o un guiso tradicional colombiano (Colombia.co, s.f.).
Esta arepa es muy popular en los departamentos con tradición cafetera, como Caldas, Quindío, Risaralda y Antioquia (Tapazco, 2020). Allí, no puede faltar un buen desayuno para comenzar el día con energía.
Arepas colombianas saladas
Las arepas son un plato muy versátil. Como vimos, las hay dulces y hasta neutras en sabor. Igualmente, en el país existen preparaciones de sal que satisfacen todos los antojos. Estas son algunas:
- Arepa santandereana: hecha de maíz molido, yuca y chicharrón. Esta combinación única la hace crujiente y llena de sabor. Se asa por ambos lados usando una parrilla a fuego medio. No solo es el complemento perfecto de unos huevos al desayuno, sino que también destaca lo mejor de una sopa o de la carne de res (Colombia.co, s.f.).
- Arepa de huevo: la reina de las arepas colombianas con relleno, esta invención de la Costa Caribe es una delicia nacional. Combina el maíz indígena, la tortilla española y la fritura africana. La masa de maíz amarillo se prepara delgada para poder formar una arepa hueca que se frita para obtener consistencia. Luego, se rellena de huevo crudo y se sigue friendo. En ocasiones también lleva carne o, incluso, frutos del mar, para potenciar su increíble sabor.
Las arepas son mucho más que un alimento esencial para las familias. Conforman nuestro patrimonio cultural y son pieza fundamental de las tradiciones de Colombia. Esto es evidente en el viaje de sabores que podemos emprender por nuestro país con cada una: boyacense, de huevo, paisa, de chócolo, santandereana, ¡la que prefieras!
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