Cómo hacer un desayuno sorpresa para tus hijos.
Hay muchas maneras de celebrar con tu hijo sus logros y fechas especiales. Una de ellas es prepararle una comida única, muy colorida y llena de los sabores que a él o ella le encantan. Te traemos algunas ideas de cómo hacer un desayuno sorpresa para los pequeños de la casa.
Tabla de contenidos
Los desayunos sorpresa para niños deben tener formas divertidas y ser bastantes coloridos. Si se te da bien el diseño puedes crear la figura de su personaje, animal u objeto favorito con la comida.
Por ejemplo, una margarita donde el centro sea un muffin y las hojas trozos de piña, un pancake de colores o waffles con topping de crema en forma de oso. Asimismo, puedes usar globos, carteles o mensajes con salsa para la decoración.
También es importante crear desayunos ricos y distintos a lo que tu hijo come con frecuencia. Anímate a incluir nuevos sabores en su comida que sepas que podrán gustarle.
La clave para hacer buenos desayunos para niños es que tengan mucho sabor, color y los alimentos de su agrado (FDA, s.f.). Incluye por lo menos 3 de estos grupos alimenticios (De Arriba, 2017):
Ahora sí, veamos cómo hacer un desayuno sorpresa para niños que sea colorido y delicioso.
Los desayunos con frutas siempre son una buena opción para los niños. En esta oportunidad haremos un mix de frutas en forma de nave espacial. Para preparar 1 porción necesitas (Hola cocina, s.f.):
Corta las rebanadas de piña en triángulos y crea la forma del cohete. Coloca las moras sobre la piña simulando las ventanas. Las fresas fileteadas van en la base del cohete.
Pica la sandía en forma de estrellas y espárcelas por el plato. Por último, coloca el waffle en la parte superior simulando la luna y unta el chocolate o crema de maní.
El emparedado es uno de los desayunos favoritos de los niños. Así que, si juegas con las formas y rellenos quedará encantado. Para hacer 1 porción necesitas (Melara, 2019):
Este es el paso a paso de cómo hacer un desayuno sorpresa en forma de oso:
Derrite la esparcible Campi® en una sartén y calienta los panes hasta que doren. Rellena el emparedado con queso crema y jamón u otra proteína.
Corta un círculo grande para la cara del oso y dos pequeños para sus orejas. Con la salsa de tomate dibuja los ojos, nariz y boca de tu oso y ¡listo!
Estas son tan solo 2 ideas de cómo hacer un desayuno sorpresa para tu pequeño. Pero, como puedes ver no necesitas experiencia culinaria, solo un poco de creatividad. Anímate a prepararlos y disfruta de la reacción de tu hijo.
BIBLIOGRAFÍA.